Mis queridos Exageraditos:

Comunicado:

Hola, en primer lugar quiero darte las gracias por visitar mi blog, sea porque pasaste de casualidad o llegaste a través de otra persona, en segundo lugar me gustaría realmente visitar también tu blog, y más si eres mi seguidor porque me gustaría ser tu seguidora también; sin embargo, mi querido amigo, muchas veces no he podido acceder a tu blog porque no es visible el enlace respectivo, no es por falta de interés...¡jamás!, así que te pido un favor, si pasas por aquí y me sigues o no, te invito a dejarme un comentario, porque así me es más fácil llegar a tu blog. Si así lo haces no dudes que te visitaré prontito.
Palabra de Nina ♥
Mira que ya pasaron por aquí:

Gracias...los quiero

martes, 15 de noviembre de 2011

¡Asesinando barbies!

Amigos sé que no les he hablado mucho acerca de la menor de mis hermanas, Patty, de diez años,  la pequeñuela, pero hoy sí quiero hacerlo, porque a pesar de que es una especie rara de supervivencia hostil y quisquillosa… la quiero porque es mi hermana chiquita.
Les cuento que  ayer mi mamá me pidió que despertara a mi hermana para que vaya al colegio, para rendir uno de sus últimos exámenes, pues no quería que se le hiciera tarde. Quien les escribe, de mala gana y con sueño aún, fue a su habitación. La peque aún seguía en la cama, la llamé y  esperé a que se desperezara a sus anchas. Sin embargo, me pareció raro no ver sus barbies en la repisa que está sobre su cama. No le dije nada, esperé a que bajara y busqué con la mirada dónde podrían estar ¡y qué creen, todas sus muñecas estaban en su bote de basura! Yo casi pego el grito en el cielo porque algunas de ellas se las heredé yo misma, y otras tantas fueron regalos de mis padres y familiares que saben la debilidad de la peque por las barbies. No me pude contener y bajé con el bote de basura lleno de las muñecas y se lo enseñé a mi madre delante de la peque; ésta  no dijo nada, pero en un instante gritó que ya no las quería. Mamá la llevó a su habitación y tuvo con la peque una de esas conversaciones,  parecidas a las que tuvo conmigo hace años cuando intentaba hacerme entender que a las barbies no se les pinta la cara con plumón ni se les corta el pelo porque luego no les crece.  La peque salió con los ojos rojos y se fue al cole, sin siquiera voltear a mirar sus muñequitas. Mamá me contó lo sucedido. Una niña de su salón, que en los estudios, es la competencia más cercana de mi peque, se enteró que mi hermanita aún jugaba con muñecas y en medio de todos sus compañeritos de clase le ha gritado: “Patty  sigue jugando con muñecas. Todas las que juegan con muñecas son unas taradas y peor si son barbies” A ella le ha dolido tanto eso que ha decidido nunca más jugar con sus muñecas…
En lo que a mí respecta…antes de buscar a la niñita esa, ¡voy a averiguar cuánto es la pena por asesinar a una niña babosa!!!!

jueves, 10 de noviembre de 2011

"Trabajo Sucio"

Mis amigos,  ¡no saben qué día he tenido!, y yo que pensaba aprovechar todo el día ya que no tuve clases, las cancelaron; quería salir con mi bicho, pero él sí tenía clases, así que decidí  salir con mi prima (ya les contaré de ella)  ¡Y a que no saben! voy a mi guardarropa para escoger lo que me iba a poner y ¡¡¡Oh por Dios!!! grande fue mi sorpresa cuando no encontré casi nada de ropa limpia, y hasta pensé: “me han robado”, “fue la enana de mi hermana” ó  “papá lo donó todo a los más necesitados” . Me fui corriendo a preguntar a mi mamacita por mi ropita. Ella no me dijo nada y sólo me hizo señas con ese dedito acusador y me señaló la pila de ropa sucia amontonada en el cuarto de lavandería, cuartito al que, dicho sea de paso, habré visitado un par de veces en mi vida, y fue entonces que entendí todo perfectamente; cada vez que ensuciaba mi ropa mi única preocupación había sido colocarla en una canastilla que hay en mi habitación, y era mi abnegada madre la que se la llevaba a ese cuartito del terror,  la echaba en la lavadora, ponía “on” y dejaba que el milagroso aparato haga el “trabajo sucio”; luego yo encontraba mi ropita planchada, guardada y lista para ponerme. No piensen mal, las piezas pequeñas (medias y chones) los lavaba yo mismita.
Así que mi mamita para darme una buena lección y para que aprenda que por más que tengamos con nosotros a Luchita (ella trabaja en casita), no debo echarme al abandono, así como lo he venido haciendo; me hizo lavar a mano todita mi ropa, no saben cómo tengo las manos. Ella dice que en tiempos antiguos yo diría primitivos se lavaba la ropa a mano, arrojándola sobre una enorme piedra al pie de un río, y que yo debía aprender de todo y  que la tecnología puede arruinarnos la perspectiva, y arruinarme las uñas, después de esto he aprendido y he reflexionado y ahora sé que cada vez que mi ropa se acumule, debo ponerla en la canasta … y llevarla directamente al cuarto de lavado...

martes, 1 de noviembre de 2011

Tan tan ta ta...♥


¡¡¡Les cuentooooo!!! tengo una amiga de la facultad que tiene mi misma edad…15…  es decir,  19 años y ¡qué creen! ¡Se casa!…sí como lo oyen ¡se casa a fin de año! pero no, no crean que está en apuros….nooooo, se casa por puro gusto, y lo hace con un chico que sólo es un año mayor que ella y que aún no termina de estudiar. 
Cuando escuché la noticia no lo podía creer, ella será la primera de la promo´ que se case…y eso me hizo pensar y pensar y pensar…hasta el punto de acariciar una loca idea en mi cabecita…loca… “y si yo y  el bicho”… “el bicho y yo”…¡ahhhh qué romántico sería!...se imaginan cuando me pregunten: “aceptas por esposo al bicho éste”…y yo diga: “sí”…¡ay!… ¡que ya me dieron ganas de casarme!… de ponerme mi vestido blanco (hecho a mi estilo obviamente), de comer torta e irme de luna de miel :P, y ello no tendría por qué ser una locura, pues creo que entre nosotros y la amiga que les cuento y su futuro esposo no hay gran diferencia…ambas parejas somos aún estudiantes y aún no trabajamos, la única e insignificante diferencia que encuentro es que los futuros suegros de mi amiguita tienen una cadena de farmacias aquí en la ciudad…y bueno creo que eso ayuda en algo ¿no?

Más exageraciones por leer